Por Raul Mannise / 01/04/2020 / 3 minutos de lectura
La genciana no es exactamente una planta sino un género de ellas, cuyo nombre científico es Gentiana, con más de 1500 especies diferentes, pero menos de 400 clasificadas. Se las conoce popularmente también como hierba de San Ladislao.
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Una de estas especies es la genciana amarilla, cuyo nombre científico es Gentiana lutea L., y es una hierba que puede alcanzar los dos metros de altura y cuyo aspecto alargado y espigado recuerda a un cereal.
Sus flores, como bien indica su nombre, son amarillas y tienen entre 5 y 7 pétalos circularmente distribuidos. Es una planta endémica del centro y sur de Europa, y en España crece en la región cantábrica, al noroeste del país.
Aunque toda la planta contiene propiedades medicinales, la mayoría de ellas se concentran en su raíz, motivo por el cual es precisamente de ésta de donde se extraen los productos derivados.
Algunos de estos productos no propiamente medicinales, sino más bien aperitivos digestivos a base de alcohol como el amargo de Angostura o el bíter francés Suze entre otros, así como algunos licores de hierbas y vermús.
Otros nombres con los que se conoce a esta planta popularmente son agenciana, cenjana, junciana, chanzaina y funciana.
Propiedades de la genciana
Las propiedades de la genciana amarilla a nivel medicinal, principalmente concentradas en su raíz como decíamos, son diversas. Esta se utiliza desecada, para infusiones o se extraen sus propiedades para crear tinturas.
La raíz se saca a finales de verano o durante el otoño, tanto para desecar como para hacer extractos líquidos o tinturas.
Las propiedades medicinales de la genciana son antihelmínticas, antiinflamatorias, antisépticas, purgantes, emenagogas, antipiréticas y digestivas.
Beneficios de la genciana
Las propiedades de la geniana aportan enormes beneficios digestivos, pero también depurativos y ayudan al buen funcionamiento de muchos otros órganos. Entre estos usos cabe destacar:
Contra los parásitos intestinales. La raíz de genciana es muy útil para expulsar a los parásitos o lombrices del cuerpo gracias a sus propiedades antihelmínticas.
Limpieza biliar. Los colagogos presentes en los extractos de genciana ayudan a la secreción de la bilis retenida en la vesícula biliar.
Salud menstrual. Los principios emenagogos de la planta ayudan a estimular el flujo sanguíneo en la zona de la pelvis, lo que beneficia la circulación y alivia los períodos menstruales.
Antifebril. Las propiedades antipiréticas, antitérmicas y febrífugas de la genciana ayudan a bajar los calores febriles. Esto no significa, sin embargo, que actúe sobre el motivo de la fiebre, que puede ser viral, bacteriano, infeccioso, etc., sino que ayuda a disminuir la temperatura corporal.
Estimular el apetito. La genciana es un estimulante del apetito, sobre todo muy apreciado en los casos de enfermedades crónicas o tratamientos (quimioterapia, radioterapia, retrovirales) muy agresivos para el organismo que llevan a que el paciente pierda por completo las ganas de ingerir alimentos.
Contraindicaciones de la genciana
La genciana tiene algunas contraindicaciones que se deberían tener en cuenta. Una de ellas es que debido a su contenido de alcaloides, no se considera segura (o mejor dicho, no se ha demostrado su seguridad) en mujeres embarazadas, lactantes ni en niños pequeños, menores de dos años de edad.
Las personas que sufran problemas de tensión, ya sea tensión alta (hipertensión) o tensión baja (hipotensión) deberían consultar a su médico antes de consumir esta planta.Si bien las propiedades digestivas y para mejorar la salud estomacal son muy recomendables, para los casos de úlceras de estómago, acidez crónica o inflamaciones de las paredes del estómago, no se ha demostrado que sea buena, y hay estudios que indican más bien lo contrario, por lo tanto es mejor evitar la raíz de genciana en estos casos.
